Las 5 Pautas para Aumentar la Autoestima que Nunca Fallan
La autoestima se refiere a las creencias de las personas sobre su propio valor. También tiene que ver con los sentimientos que las personas experimentan que se derivan de su sentido de dignidad o indignidad.
La autoestima es importante porque influye en las elecciones y decisiones de las personas, en otras palabras, la autoestima cumple una función motivadora al hacer más o menos probable que las personas se cuiden y exploren todo su potencial.
Las personas con autoestima alta también son personas motivadas para cuidarse a sí mismas y se esfuerzan de manera persistente hacia el cumplimiento de los objetivos y las aspiraciones personales.
Las personas con menor autoestima no tienden a considerarse merecedoras de resultados felices o capaces de lograrlos, por lo que tienden a dejar que las cosas importantes se deslicen y sean menos persistentes y resistentes en términos de superar la adversidad. Es posible que tengan los mismos objetivos que las personas con mayor autoestima, pero en general están menos motivados para perseguirlos hasta su conclusión.
La autoestima es un concepto algo abstracto; es difícil para alguien que no lo tenga y saber cómo sería tenerlo. Una forma en que las personas que tienen menor autoestima comienzan a apreciar cómo sería tener una mayor autoestima es considerar cómo pueden sentirse acerca de las cosas que valoran en sus vidas.
Por ejemplo algunas personas realmente les gustan los coches debido a que los autos son importantes para ellos y por esto estas personas cuidan muy bien de ellos, toman buenas decisiones sobre dónde estacionar el automóvil, con qué frecuencia deben repararlo y cómo lo conducirán; pueden decorar el auto y luego mostrarlo a otras personas con orgullo.
La autoestima es así, excepto es eres tú a quien amas, a quien cuidas y de quien te sientes orgulloso. Cuando los niños creen que son valiosos e importantes, se cuidan bien, toman buenas decisiones sobre sí mismos que aumentan su valor en lugar de descomponerlo.
Contents
Dimensiones de la autoestima
Se piensa que la autoestima ocurre continuamente, lo que significa que se piensa que varía suavemente en cantidad o magnitud de baja a alta en diferentes individuos. Algunas personas tienen una mayor autoestima, mientras que otras tienen una menor autoestima. Las diferencias entre estas personas no son obvias, sino que son aparentes solo a través de la comparación de sus pensamientos y sentimientos acerca de su valor.
También se cree que la autoestima varía de otra manera que podríamos describir como proporcionalidad o razonabilidad. Resulta que no todos los casos de alta autoestima son los mismos.
Algunas personas con alta autoestima han llegado a ese lugar basándose en una serie de logros reales. Se dan crédito por poder enfrentar nuevos desafíos anteriores, su buena opinión de sí mismos es proporcional a los desafíos reales que han superado en la vida.
En contraste, hay otras personas cuya alta autoestima parece excesiva y desproporcionada a sus logros y acciones reales. Estas personas piensan bien de sí mismas, pero no pueden señalar logros, acciones o elecciones pasadas y sustantivas que hayan hecho, lo que justificaría esa alta opinión de sí mismo ante un observador imparcial.
Su mayor autoestima se basa más en un sentido de derecho que en cualquier logro. Esta versión de alta autoestima se considera menos saludable psicológicamente que a la autoestima proporcional, principalmente debido a la conducta egoísta y egocéntrica que tiende a acompañar el sentido de derecho.
Pasos para lograr una autoestima alta
Cuando se trata de tu autoestima, solo una opinión importa de verdad: la tuya. E incluso esa debe ser cuidadosamente evaluada. Tendemos a ser nuestros propios críticos más duros. A continuación encontrarás algunos consejos para que logres aumentar tu autoestima:
- Ten en cuenta: No podemos cambiar algo si no reconocemos que hay algo que cambiar. Al simplemente tomar conciencia de nuestro diálogo interno negativo, comenzamos a distanciarnos de los sentimientos que genera. Esto nos permite identificarnos menos con ellos. Sin esta conciencia, podemos caer fácilmente en la trampa de creer en nuestra conversación autolimitada, y la verdad es que no debes creer en todo lo que piensas, ya que los pensamientos son solo eso, pensamientos.
- Cambia la historia: Todos tenemos una narrativa o una historia que hemos creado sobre nosotros mismos que da forma a nuestras percepciones, en las que se basa nuestra autoimagen central. Si queremos cambiar esa historia, debemos entender de dónde vino y dónde recibimos los mensajes que nos contamos a nosotros mismos. ¿De quién son las veces que estamos internalizando? A veces los pensamientos negativos automáticos como ‘eres gordo’ o ‘eres perezoso’ se pueden repetir en tu mente tan a menudo que empiezas a creer que son verdad. Estos pensamientos se aprenden, lo que significa que se pueden desaprender, puedes empezar haciéndolo con afirmaciones.
- Evita caer en el agujero del conejo de la comparación y la desesperación: Dos cosas claves que se deben enfatizar son practicar la aceptación y dejar de compararte con los demás. Solo porque alguien más aparezca feliz en las redes sociales o incluso en persona no significa que sea feliz. Las comparaciones solo conducen a una conversación negativa, lo que conlleva a la ansiedad y el estrés. Los sentimientos de baja autoestima pueden afectar negativamente tu salud mental, así como otras áreas de tu vida, como el trabajo, las relaciones y la salud física.
- Canaliza tu estrella rock interior: Albert Einstein dijo: ‘Todo el mundo es un genio. Pero si juzgas a un pez por su capacidad para trepar un árbol, vivirá toda su vida creyendo que es estúpido’. Todos tenemos nuestras fortalezas y debilidades, alguien por ejemplo puede ser un músico brillante, pero un mal cocinero. Ninguna cualidad define tu valor fundamental, reconoce cuáles son tus fortalezas y los sentimientos de confianza que general, especialmente en tiempos de duda.
- Ejercítate: Muchos estudios han demostrado una correlación entre el ejercicio y una mayor autoestima, así como una mejor salud mental. El ejercicio crea empoderamiento físico y mental; especialmente el levantamiento de pesos donde se pueden calibrar los logros. El ejercicio organiza tu día en torno al cuidado personal. Igualmente se sugiere dejar una tarea diaria en tu interminable lista de tareas pendientes con el único propósito de relajarte o hacer algo divertido, y ver cómo te sientes. También se ha demostrado que otras formas de cuidado como la nutrición adecuada y el sueño suficiente, tienen efectos positivos en la autopercepción.
Deja una respuesta